Cocorreta empieza como un puesto ambulante de venta de agua de coco con el deseo de expandirse y crecer. El modelo que busca implementar es el de bicicletas que se establezcan en puntos estratégicos para ofrecer sus productos frescos en el calor de la ciudad de Colima.
Originalmente el cliente se planteó la idea con el nombre “La Carreta” inspirado de un restaurante de hamburguesas que visitó. Durante el proceso de exploración y diseño se llegó y propuso el nombre “Cocorreta” como un juego de palabras simple y reconocible.
Siendo que todos los días entre 4 y 6 de la mañana se extrae el agua de los cocos para su venta; y el concepto refrescante y divertido que se buscaba, la identidad de la marca trabaja una paleta cromática muy allegada a lo natural en colores pero intenso y atrevido en su intensidad.
Junto con el logo se trabajó una sesión fotográfica, carteles-menú y tarjetas de presentación así como las sombrillas, lonas y utilería para uso en el actual y futuros puntos de venta.